miércoles, 12 de febrero de 2014

LOS ZUMOS. UNA JOYA ALIMENTARIA.

Sobre los zumos.

Cuando una persona adquiere una licuadora, lo primero que suele hacer es prepararse zumos de fruta. Ciertamente , no hay nada más sabroso que un zumo de manzana recién exprimido. Ahora bien, existen unas cuantas razones que aconsejan que los zumos se hagan sobre todo con las hortalizas y que las frutas, sin renunciar a tomarlas en zumos, se coman también enteras. En primer lugar las hortalizas son más difíciles  de digerir cuando se ingieren enteras. Son mas pesadas y se descomponen con mayor lentitud que las frutas. Por otro lado,  las verduras son los pilares de la vida, las responsables, las responsables de que los músculos, los tejidos, las glándulas y los órganos se mantengan fuertes y sanos. Al tomar zumos de hortalizas, el cuerpo recibe casi el 100% de los nutrientes que contienen. Por último, las frutas contienen mucha pectina, que ayuda a la digestión y regula el funcionamiento del organismo. La pectina se absorbe mejor cuando se come la fruta entera.



Los alimentos frescos, no cocinados, ayudan al cuerpo a eliminar toxinas y le permiten renovar fuerzas y energías; hacen que la piel se mantenga tersa, el cabello brillante, el aliento fresco y que todo el organismo este bien regulado. Algunas investigaciones  han demostrado que el beta-caroteno, una sustancia presente en algunas hortalizas es esencial para la prevención de muchas enfermedades, ya que actúa como antioxidante y neutraliza las moléculas perjudiciales conocidas como radicales libres. De este modo, protege las características genéticas de cada célula, lo cual se traduce en una menor posibilidad de que se desarrollen tumores malignos. Algunas verduras con betacaroteno son la zanahoria, el brécol, el repollo, la coliflor, espinacas, coles, berro.